La
amistad es como un gran árbol:
Nos
marca el camino, nos cobija con su copa, nos recuerda que las raíces nos
mantienen con los pies en el suelo, nos enseña con la fuerza de su talle, que
el crecimiento depende de uno mismo, que cada rama es una historia, cada hoja
un sueño por vivir.
Aprendemos
que su hojarasca, a los pies de su efígie, es un manto de experiencias que
debieron ser vividas, que el azote del viento, forma parte de su esencia.
Y
nos avisa, que aunque alguna vez nos perdamos,
o el tiempo se haga eterno, siempre nos estará esperando de regreso, en
silencio, de brazos abiertos y sin condiciones.
De CHARLES BLAKE
DEDICADO A MI BUEN AMIGO DANI, POR ESTAR SIEMPRE AHÍ DÁNDOME SU APOYO.
Que bonito escribes. Gracias por tu visita.
ResponderEliminarCharles, qué canto a la amistad tan profundo y real. Se nota que lo vives.Qué bonito"cada hoja un sueño por vivir", ahí está la esperanza y la ilusión que nos guia y abre horizontes nuevos cada día.Preciosa la imagen del árbol.
ResponderEliminarDarte las gracias es poco, porque cuando pasas por mi blog, iluminas con tus palabras y cercanía mi pequeño rincón abierto al mundo. Y esa brisa recorre cada espacio y llena mi corazón de agradecimiento.
Un besazo y feliz semana.